19 de junio de 2008

La audición. Segunda parte.


El mes pasado aprendimos a diferenciar la procedencia de los sonidos y de la supuesta colocación de los músicos en un escenario. Es algo importante para empezar a imaginarnos la escena a través de la música. Tenemos que educar nuestro oído y para ello debemos conocer y hacer muchas escuchas si queremos sacarle partido a nuestro equipo de música. Así que sigamos, hablemos de analizar los sonidos.

¿Os suena la palabra timbre?

El timbre es como la personalidad de cada sonido, este hace que podamos diferenciar el sonido de un violín de plástico al de uno de madera… O de una trompeta al de un saxofón. Cada instrumento tiene su timbre particular.

Por ejemplo, tenemos dos músicos en un escenario ambos con una guitarra pero la de uno de ellos está desafinada. Si tocan el mismo acorde ¿por qué somos capaces de diferenciar que no han sonado igual? Han reproducido la misma nota y con el mismo instrumento.

El timbre son una serie de armónicos que acompañan a la frecuencia que estamos reproduciendo (frecuencia fundamental), en este caso hemos dicho que han tocado la misma frecuencia, pero una de ellas está desafinada por lo que ya no está tocando el mismo tono. A parte de que cada guitarra tiene sus propiedades y suena de una cierta manera. La madera tiende a producir armónicos de pequeña amplitud sin embargo el metal tiende a producir armónicos de gran amplitud. Si tocamos una misma nota con la flauta de madera y con una trompeta, la flauta nos proporcionará un sonido más dulce y suave, debido a la pequeña amplitud de los armónicos respecto al tono fundamental, sin embargo la trompeta al ser metal nos proporcionará armónicos con mayor amplitud y por tanto escucharemos las notas un poco más estridentes y con más brillo.

Los armónicos son múltiplos de la frecuencia fundamental y varían según la fuente, el material del instrumento, su diseño y construcción y la manera en que toque ese instrumento el músico.
Ahora que sabemos algo más del timbre apliquémonoslo a nuestro equipo de car audio. El objetivo es que si reproducimos un canción en nuestro equipo, suene lo más parecido a como lo grabaron en el estudio de grabación, es decir a como suena originalmente en el formato de audio (Cd, Dvd, sacd, etc.). Para ello nuestra fuente no tiene que “modificar” la canción, nuestros amplificadores tienen que amplificar la señal lo más puramente posible, nuestros altavoces no tienen que realzar o atenuar ninguna frecuencia que esté reproduciendo y finalmente nuestro coche tiene que modificar lo menos posible el sonido que emite el altavoz.

Todo esto es el car audio, este es el objetivo de todo audiófilo, obtener un equipo y entorno neutro, un equipo que no nos modifique la señal y nos enseñe como ha querido el cantante o el grupo mostrar su música realmente.

Aquí entra la calidad del equipo y su instalación. Imaginaros que estamos escuchando a Ray Charles, gran cantante de jazz-soul. En estudio de la discográfica Ray grabó su Cd tocando en la parte izquierda de la sala con su piano. Pero sin embargo en nuestro coche Ray suena por todos lados, delante, atrás, a la derecha, a la izquierda y en vez de un piano parece que está tocando un organillo. Esto sería un claro ejemplo de un mal equipo. Ya que el Cd se escucha bien pero al pasar por una mala fuente deteriora la señal, al pasar por unos malos altavoces empeora todavía más el sonido y si encima ponemos multitud de altavoces y aun mas en la parte trasera de nuestro automóvil, ambos reproduciendo lo mismo aquello parecerá un gallinero en vez de Ray Charles con su piano.
¿Y como sabemos si la tímbrica de la canción que estamos escuchando es la correcta?

Bien pues es bastante difícil dar con la misma tímbrica por no decir imposible, pero no hay que tirar la toalla y si que podemos obtener en nuestro coche una tímbrica muy parecida a la original. Es muy complejo porque influyen muchos aspectos, muchos más que en un salón de casa pero no es imposible.

Para saber si un instrumento que está sonando en nuestro equipo de música suena como el original, tenemos que compararlo con este sin que ningún factor (fuente, amplificador, altavoz, habitáculo) nos interfiera. El único sitio que existe es el directo. Escucharlo en vivo y directo y en una sala perfectamente acondicionada a modo acústico nos dará la referencia de cómo canta el cantante, que timbre de voz tiene, que timbre tienen los instrumentos, etc.… Incluso sentir esa sensación que sentimos en directo nos la haga sentir nuestro equipo de música.

Lamentablemente nuestro oído carece de memoria y no podemos escuchar una pieza en un directo y recordarla perfectamente en nuestro coche pero sí que podemos guardar una referencia de cómo debería de sonar. Y a partir de ahí trabajar.





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