Cada vez hay más tecnología al servicio de los conductores y de su seguridad al volante. El gran número de muertes al volante hace que esta innovación sea de vital importancia, además de una inversión muy rentable.
El último invento lo ha presentado Toyota. Consiste en un nuevo sistema para evitar que el conductor se duerma al volante. Se trata de una cámara que va registrando el movimiento de los párpados y activa un sonido cuando detecta que estos se están cerrando. La gran novedad es que es capaz de detectar cuando los párpados se están cerrando, y no solo cuando ya están cerrados. Por lo que mejora sustancialmente su sistema de detección del sueño.
Ya conocíamos, de todas maneras, otros sistemas que detectaban el sueño: como el que registraba las pulsaciones del conductor por el volante y emitía una pequeña descarga al notar que se relajaba. Todos estos gadgets, son una innovación en la seguridad de la conducción. Aunque parece que las empresas fabricantes de coches, tanto como las instituciones de tráfico, cada vez se fían menos de la capacidad humana al volante. Así vemos como, cada vez más, se implementan máquinas que nos "ayudan" a la conducción. Pero a la vez, hacen parecer, cada vez más, el acto de conducir, a la represión psicológica que sufre el protagonista de la película "La Naranja Mecánica" de S. Kubrick.
El último invento lo ha presentado Toyota. Consiste en un nuevo sistema para evitar que el conductor se duerma al volante. Se trata de una cámara que va registrando el movimiento de los párpados y activa un sonido cuando detecta que estos se están cerrando. La gran novedad es que es capaz de detectar cuando los párpados se están cerrando, y no solo cuando ya están cerrados. Por lo que mejora sustancialmente su sistema de detección del sueño.
Ya conocíamos, de todas maneras, otros sistemas que detectaban el sueño: como el que registraba las pulsaciones del conductor por el volante y emitía una pequeña descarga al notar que se relajaba. Todos estos gadgets, son una innovación en la seguridad de la conducción. Aunque parece que las empresas fabricantes de coches, tanto como las instituciones de tráfico, cada vez se fían menos de la capacidad humana al volante. Así vemos como, cada vez más, se implementan máquinas que nos "ayudan" a la conducción. Pero a la vez, hacen parecer, cada vez más, el acto de conducir, a la represión psicológica que sufre el protagonista de la película "La Naranja Mecánica" de S. Kubrick.
| Visite nuestra web |  |
No hay comentarios:
Publicar un comentario